En primer lugar: La madera de nuestro contrachapado fenólico resistente a la humedad es de origen sostenible. Puede parecer obvio, pero nuestra madera solo procede de bosques gestionados de forma sostenible. Por cada árbol que se tala, se planta uno nuevo. Además, no hay tala indiscriminada de árboles.
El gestor selecciona cuidadosamente los árboles adecuados y conserva los que son importantes para que el bosque siga desarrollándose. Como prueba de garantía, trabajamos exclusivamente con socios que han superado nuestras evaluaciones y han sido seleccionados con sumo cuidado. Por último, no solo seleccionamos socios que tratan de forma sostenible y con respeto a la naturaleza, sino también a su gente y a las comunidades locales.
Nuestra madera es duradera por naturaleza. Debido a su origen, la madera dura tropical tiene una clase de durabilidad más alta y una densidad constante.
Crece en regiones que tienen un clima constante, sin la influencia de las cuatro estaciones. Esto hace que la madera pueda crecer año tras año al mismo ritmo y que la calidad sea la misma en todo el tronco. De este modo, podemos utilizar casi toda la madera de nuestros tableros y reducir los restos al mínimo.
Su durabilidad no solo es beneficiosa para la naturaleza, también lo es para la construcción de cubiertas y todos los elementos implicados en esta labor. Los tableros de Solid John tienen una vida útil mucho más larga (de 15 a 25 años) que los contrachapados multilaminados o fenólicos habituales (de 0 a 10 años). Nuestro contrachapado fenólico que resiste a la humedad es resistente por naturaleza a las condiciones de humedad. En combinación con un buen encolado WBP, garantizamos un producto de máxima calidad. Así reducimos las posibilidades de perder energía en reparar o reinstalar las estructuras del tejado. Créenos, es una buena noticia para todos. Y si no, que les pregunten a los profesionales que lo colocan o a los arquitectos.